domingo, 28 de septiembre de 2008

tembLorosa caLma

La calma que busco no es la paz de la posguerra,
la del silencio brusco cuando la nada llega,
el resignarse a vivir bajo el horror de la muerte,
el implorar justicia divina, frías venganzas, mejores suertes.

Es el vibrar temeroso de tus pupilas mojadas,
y es el temblor emocionado de sus brillos,
es la quietud de tu alma en la nostalgia,
la paz que busco, que necesito.

Es saber que sabés que te entiendo,
es creer que podés, que podemos,
es saborear la dulce sal de esos besos,
toda la calma que busco, toda la paz que deseo.

lunes, 22 de septiembre de 2008

acuareLa


Corre volteándose a mirar con miedo,
tras él, rodante es el peligro intenso
de una majestuosa gota cristalina de rocío.

En la cornisa de una hoja
él ha inventado un trampolín,
rompe el aire con el rostro desbordante de emoción.

Pinceles invisibles mezclan los colores,
lo mismo da si es cielo o suelo lo que se acerca.

En su excitante viaje por el cielo
él ha arrancado el miedo de su pecho,
y aunque incierto es su destino sabe que
no volverá a temer.

Pinceles invisibles mezclan los colores,
lo mismo da si es cielo o suelo lo que se acerca.

De agua es el cielo si aprendo a nadar
entre mis sueños.
Rayos de soles verdes y azules
con los que juego.

Pinceles invisibles mezclan los colores,
lo mismo da si es cielo o suelo...
Pinceles invisibles mezclan los colores,
lo mismo da si es cielo o suelo lo que se acerca.
Ésta es la letra de una de mis canciones, aunque para mí en realidad es un cuadro hecho de melodías, palabras y esperanza.

rosas


jueves, 11 de septiembre de 2008

ser diferente

tamaño del original: 70cm x 70cm
Yo temo...
yo debo...
yo quiero...
yo puedo...
yo necesito...

...ser diferente.


Me atrae...
me asusta...
me cansa...
me gusta...
me duele...

...ser diferente.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

por un instante pude ver La eternidad



amén


Que mi risa sea tu risa,
que mi boca sea tu boca;
que mis ojos y tus ojos
tramen puentes invisibles,
y que el paso de los años,
caudaloso de vivencias,
cave un cauce de experiencias
en que el amor sea libre:
de nadar desde mis montes
a tu océano turquesa,
y trazar en su camino
trayectorias imperfectas;
de saber que al transitar
irá nutriendo estas tierras;
de soñar, de vislumbrar
flores, brisa, sol y hierba.

Lo que Luego se consume


bienvenido aL mundo de Las hadas


escape a La reaLidad


eL gLobo mágico

Ese día el Clown no sólo llevaba los usuales globos de colores, ese día tenía uno especial… uno que yo juzgué mágico. De a ratos parecía transparente, y otras veces de un color indescriptible… un color que yo juzgué mágico. De pronto el Clown me ofreció aquel increíble globo mirándome con una sonrisa grande pero a la vez extraña, tal vez demasiado grande, tal vez carente de toda la inocencia que yo tenía en ese entonces, esa misma inocencia que me llevó a extender mi tierna manito y tomar el cordel de aquel globo mágico.

El payaso no dejaba de observarme, quería captar cada reacción mía, como si pretendiera absorber con sus ojos cada brillo de los míos, cada risa de niña, cada recuerdo feliz, toda mi humilde alegría. Con un gesto y un brazo extendido me invitó a subir al carrusel, y allí dudé, temía perder mi preciado globo mágico a causa de las excitantes vueltas de la calesita. Pero al verme paralizada, el Clown insistió empujándome hacia ella repetidamente. Casi sin darme cuenta el juego ya estaba en marcha y yo sobre un antiguo caballito blanco de crines doradas. Estaba ansiosa y emocionada, y con algo de miedo en el corazón apreté bien fuerte en mi mano la piolita de aquel globo increíble.

Todo giraba y giraba muy rápido, tanto que no veía más que difusos rayones de colores, hasta que en dado momento la calesita comenzó a moverse a lo largo de una extensa y vertiginosa espiral hacia abajo, llevándome a lugares oscuros, a pozos infinitos, a sitios donde mi alma se vació de canciones y se llenó de escondites sombríos. Buscaba con la vista al payaso, pero ya no estaba allí, deseaba encontrar en el rostro de otros niños mi propio rostro, para así acompañarnos mutuamente en aquel extraño viaje del terror. Pero no había ninguno, allí no existía nada más que mi globo y yo.

Al terminar aquel infierno de bruscos giros sin sol, quise llenar nuevamente mi alma de ilusiones, esas que sólo podría darme mi globo mágico, ese al que tan firmemente sujeté para no perderlo jamás. Pero cuando elevé hacia él mi mirada esperanzada, algo había cambiado, ya no tenía más aquella excepcional transparencia ni aquellos destellantes colores desconocidos, ya no guardaba esa magia que yo tanto necesitaba, y definitivamente, ya no me hacía feliz.

Contemplé entonces aquel desolador parque de diversiones desierto y abrí mi pequeña mano ya sin fuerzas abandonando aquel globo inservible para que se reuniera en su vuelo con la inmensidad del cielo gris. Muchas lágrimas rodaron sobre mis pómulos blandos, y a pesar de que me encontraba completamente sola lloré en silencio, como si así pudiera ocultarme a mí misma mi propia vergüenza, mi propio dolor.

Hasta el día de hoy suelo ver en mi mente al Clown y su risa burlona, y el recuerdo imborrable de ese engaño mancha con su inevitable presencia cada nuevo momento de satisfacción. Creo que ya nunca podré olvidar ese cruel rostro pintarrajeado ni todo el inabarcable vacío que dejó en mí; pero sí, a veces, y sólo a veces, escribo un relato, una poesía o una canción, algo para ofrecerle a las almas heridas… algo que yo juzgue mágico.

casuaLidades


Como cada vez que la angustia provoca un hondo pozo en mi pecho, salí a disfrutar del gélido viento que, sin descanso y sin piedad, intentaba penetrar mi desahuciado rostro. Y sin rumbo cierto, dirigí mis cansinos pasos hacia el radiante horizonte. Noté cómo a través de mis ojos, inflamados por el reciente llanto, gotas doradas de sol colisionaban desvergonzadamente con mis húmedas pestañas, formando allí unos destellantes circulitos nacarados.

Es notable cómo la belleza del mundo se empeña en arruinar los más imponentes momentos de desesperación. Ya había experimentado esta sensación antes, cuando una inoportuna mariposa de ropaje negro y anaranjado furioso decidió cruzarse en otra de mis tristes caminatas diurnas. Estos paseos suelen ser bastante efectivos cuando el encierro que me ofrece la insidiosa racionalidad se torna insoportable.

Comienzo a pensar que aquellos círculos nacarados, o aquella mágica mariposa, no necesitan explicación alguna. Ninguna ciencia podría saciar la infinita curiosidad que han despertado en mí estos fenómenos de avasalladora simpleza disfrazada de complejidad. Tal vez, estos eventos fortuitos sólo requieran de nuestra aceptación, para que así, al contemplarlos sin cuestionamientos, el espíritu se disponga a dejar atrás su tan arraigado dolor.

todo es caLmo


Todo es calmo,
agua estancada, putrefacta, maloliente…
Todo es silencio,
ruidos sordos, bocas ferozmente amordazadas.

Yo era el mar tumultuoso y el viento que lo agitaba,
pero no quieras ahora mover mis mugrientas aguas.
Sí, cantaba para mí cuando creías que te cantaba,
cantaba para gozar al saber que te gustaba.
Fuego egoísta, pero fuego al fin.
Juego siniestro de sonrisas, de mentiras blancas.

Todo es calmo ahora.
Compré este imperturbable gesto de desgano
y esta perdurable falta de alegría.
Todo es silencio ahora.
He perdido la voz de tanto llorar
y hasta vendí mi amor por las melodías.

Sólo se me ocurre huir,
hacer un viaje excitante,
pedirte que me acompañes,
que por favor me acompañes.

Pero es inútil ahora;
pues yo era el mar, el viento, el fuego, tu fuego…
Pero todo es calmo ahora,
hoy soy mugre y silencios.

hada fantasma deL bosque


premonición


Una brecha en el tiempo surgirá,
una falla en su continuo afán de andar,
inservible reloj de tormentas de arena.
Un impasse en su incansable palpitar,
algo de caos en su flujo siempre igual,
descansaremos de su hostil ritmo arbitrario.
Un recuerdo del futuro marcará
cual destino he de rechazar,
pero con una metáfora imprecisa.
Luego los segundos volverán
con su constante, aburrido caminar
y se materializarán las visiones de aquel rito.

Burlas absurdas de lo sobrenatural
me ilusionan con cambiar mi senda:
sólo comprendo la visión una vez que se concreta.

Y aquel pulso abrumador
de mi último estúpido reloj
me habla de esta soledad con monótona certeza.

¿Son acaso inevitables los hechos que vendrán
abriéndoles paso a más miserias?
Llena de ira destruí el reloj…
… su ritmo aún suena en mi cabeza.

desnuda


acerca deL tiempo

El tiempo es un bien escaso, y muy codiciado estos días, mas la única forma de conseguirlo es no desperdiciarlo buscando obtener un poco más. Puede parecer una visión muy conformista, pero no se confundan… lo es.

vueLa tan aLto como puedas, Las aLas serán tus sueños


acerca deL tiempo que dedico aL arte


El tiempo que dedico al arte no es tiempo perdido, pues nadie conoce cuál es el fin último de la existencia. Quizás nuestra misión en la Tierra sea apreciar su exorbitante belleza y explorar la misteriosa condición humana expresándose de las formas más diversas. En este caso, los ociosos artistas habrían invertido el escaso y valioso tiempo que poseíamos; y aquellos fanáticos del éxito, aquellos que nacen, crecen, se reproducen y mueren en tiempo y forma, habrían desperdiciado sus horas en una misión totalmente infructífera.

Pensándolo mejor, esto parece muy extremista; seguramente el arte sea una forma de hacer verdaderamente valioso el tiempo, que en sí, no tiene el más mínimo valor, y en ese caso, los que perdieron su tiempo, no habrían perdido nada realmente importante.

fumando


merLín



No puedo evitar preguntarme qué colores, qué matices, tendrá la vida vista a través de tus pintorescos ojos de niño. ¿En qué dulces travesuras piensas? ¿Cuál será la fuente de tu inagotable alegría?

Tu inocencia me conmueve, tu inconciencia me fascina; son envidiables dones para mi espíritu tan imperfectamente humano, que intenta sin éxito acallar su insensible voz interna.

Te miro fijamente y con ternura, espero saciar mi sed de paz con tu infinita bondad, tu extasiante hermosura, hundirme en el eterno espacio de tu mente serena.

Repetidas veces dejé aflorar esa maldita costumbre de esperar que me comprendas, pero ¡basta! Sólo necesito respirar el inefable amor que emanas, cuando sobre mi pecho angustiado, entonas un arrullador ronroneo de consuelo.


invierno crueL


insomnio


Como si de días se tratara,
cuento las ovejas que pasan,
ya no me detengo en sus brincos
ni me enternecen sus caras.
Ansío que lleguen,
y que pronto se vayan,
sumar una más al conteo,
poder trazar otra raya.

Detesto observarlas cruzar
con su insulsa monotonía:
un fondo inerte, y sin impasse
la misma cinta repetida.

Como si de ovejas se tratara,
cuento los días que pasan,
ya no me contentan sus brincos
y me dan nauseas sus caras.
Ansío que lleguen,
que lleguen y se vayan,
para que atraigan al sueño,
y el sueño a la calma.

Libre


veo veo


Te veo con mis lentes y sin ellos,
te veo bajo una lupa,
te veo a pleno sol;
refriego mis hundidas cuencas
y te observo aparecer entre la niebla.

¿Estás ahí realmente?
¿Existes?
¿¡Existes o no!?
¿Es tan real un “eres” como puede serlo un “soy”?

Mis ojos nunca hubiesen resuelto el dilema,
bastó un abrazo,
bastó tu abrazo…
la mejor respuesta suele ser la más simple.

rockstar


roja ambición


Me imagino en sueños entregada
al poder de tu embriagante carmesí,
y en furioso mar, mi sangre espesa
desatando toda su violencia en mí.

La jugosa carne de tu fruto,
ambrosía carmín, roja ambición,
sobre el marco de tu piel inmaculada
me sumerge en abismos de pasión.

Entrégale a mis sedientos labios
aquel dulce encanto rojizo,
que en crepitantes flamas me muero
ansiando tu flor y su hechizo.

noche de Locura y soLedad


mi recuerdo


Mi recuerdo es mi historia, mi sangre;
mi recuerdo es difuso, engañador;
pues en su metamorfosis me incita
a odiar lo que un día fue amor.

Pero por suerte también he sufrido,
por suerte aprendí del dolor,
y hoy soy más feliz añorando
la más cruel desilusión.

Mas temo al momento oscuro
cuando en la tierra se fundan
mis memorias y yo.

Nada aprenderé de esa herida,
y tal vez tu recuerdo difuso
odie el día en que me amó.

si pudiera


Ay, si tan sólo pudiera
ser experta en el arte de la improvisación:
me ahorraría muchos perdones,
sabría evitar un adiós,
inventaría mil canciones
que sólo recuerde Dios;
tendría la respuesta correcta,
o de las malas, la mejor;
te hubiera regado del llanto
que luego en soledad me abatió.
Te hubiera mirado a los ojos,
y despojándote del rencor,
te hubiera besado en silencio;
sabría evitar un adiós.

pasos hacia eL soL


Espeso el tiempo fluye lentamente,
inanimadas figuras a mi alrededor,
una calle sin horizonte y un retorno que quiero evitar,
pero el sol me empuja a caminar.

En su escondite algún duende llora suavemente,
inmaculadas gotas de dolor.
Algo del aire que respiro quizás halla rozado sus mejillas;
mi pecho encierra su mágica aflicción.

Bruscos sollozos fluyen de repente,
incontenibles gotas de dolor.
Como un gesto de consuelo
o la burla siniestra de algún dios,
un rojo sol rebosa de esplendor.

de pociones y sonrisas


Voy a contarte una bella historia
que una vez fue susurro en mi oído,
de un mágico ser que habita
tras las cascadas del río.

Dicen que en oxidados calderos
prepara sus secretos brebajes,
mezclando el canto furioso del agua
con un centenar de arcoiris salvajes.

Creen que este ser es eterno,
mas no puedo asegurarlo,
yo presiento que el tiempo
es efímero en sus manos.

A las pícaras hadas del bosque
les vende un sinfín de pociones,
a cambio de sus sonrisas,
de mariposas y flores.

Noches de oscuras nubes violáceas,
y un mar de estrellas amarillas,
ocultan su frágil figura
de humanas miradas espías.

Sale a regalar su magia
a las tiernas criaturas dormidas,
rociando hechizadas aguas
en sus rozagantes mejillas.

Quise contarte una historia,
que explique por qué tu sonrisa,
es cálida como el sol,
y es amable y cristalina.

Me deslumbra tu inocencia,
tu exuberante alegría,
y es magia lo que yo siento,
cuando sonriendo, me miras.

aLadas


una mirada


fLébiL


una Lágrima